UN AYER SIN HOY, ES UN HOY SIN AYER. . .
Escrito por
@ROBINFREE
Soy, una mañana sin alba,
la canción que no se canta,
un faro que ya no ilumina,
ese tren que no pasó.
Soy noche que no oscurece,
barrilete que nunca vuela,
un perro que ahora no ladra,
el barco que no zarpó.
Soy frío café, sin aroma,
rocío que no humedece,
gorrión sin alas preso en su rama,
flor que sus pétalos nunca vio.
Soy tormento en la alegría,
y en el coro silente voz,
gozo escuchando a otros
que cantan mejor que yo.
Te decepcionaré, estoy seguro,
por los cambios que percibes,
mas apelo a tu memoria
dado el tiempo que pasó.
Cuando aferrado a tus caderas,
me sentía un sol despuntando,
y cantábamos en el arribo
una iluminada canción.
Las noches eran de ensueño,
remontaba entre tus cometas,
mi barco te recorría plena
en aquél mar que lo envolvió .
Tu aroma y el mío vestimos,
mi rocío solía extasiarte,
mientras tu rostro en la almohada
reflejar la eternidad permitió.
Cuando el ave aún era libre
se exultaba sobre tus paisajes,
y acariciada por un trino ardiente
tu flor en mis labios se abrió.
Ahora no pretendo indulgencia
pero no juzgues este hoy tan vacío,
al menos recuerda, mi vida,
ayer, fui el hombre que te amó.
FERNANDO
26/06/07
la canción que no se canta,
un faro que ya no ilumina,
ese tren que no pasó.
Soy noche que no oscurece,
barrilete que nunca vuela,
un perro que ahora no ladra,
el barco que no zarpó.
Soy frío café, sin aroma,
rocío que no humedece,
gorrión sin alas preso en su rama,
flor que sus pétalos nunca vio.
Soy tormento en la alegría,
y en el coro silente voz,
gozo escuchando a otros
que cantan mejor que yo.
Te decepcionaré, estoy seguro,
por los cambios que percibes,
mas apelo a tu memoria
dado el tiempo que pasó.
Cuando aferrado a tus caderas,
me sentía un sol despuntando,
y cantábamos en el arribo
una iluminada canción.
Las noches eran de ensueño,
remontaba entre tus cometas,
mi barco te recorría plena
en aquél mar que lo envolvió .
Tu aroma y el mío vestimos,
mi rocío solía extasiarte,
mientras tu rostro en la almohada
reflejar la eternidad permitió.
Cuando el ave aún era libre
se exultaba sobre tus paisajes,
y acariciada por un trino ardiente
tu flor en mis labios se abrió.
Ahora no pretendo indulgencia
pero no juzgues este hoy tan vacío,
al menos recuerda, mi vida,
ayer, fui el hombre que te amó.
FERNANDO
26/06/07
Más notas de PoesiasVer todas
Más notas de Poesias
La lluvia de tu amor (Leonardo67)
@LEONARDO67 26/06/2007
Poesia del Mariposa TIGRES
@SERGIO 01/07/2018
BURBUJAS DE AMOR... BETTYSPIN
@BETTYSPIN 05/09/2016