No sientas verguenza

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@ANSOGUAT

13/05/2011#N36249

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Me lo mandó una amiga, espero les guste, venía sin título

 

"Ya sé que va a ser jodido, amigo mío. Sé que presentarse a una entrevista de trabajo, a competir con otros más jóvenes y preparados, cuando tienes medio siglo de almanaque y canas en la cabeza, no será el momento más feliz de tu vida. Probablemente los fulanos de quienes depende tu destino sean niñatos de diseño, de esos que se creen que siempre van a ser jóvenes, y listos, e incombustibles, y desprecian a la gente sin adivinar que un día ellos mismos estarán con el cuello en el tajo. Tu experiencia les importa una mierda, eso ya lo sabes. Quieren jóvenes de veinte años sin cargas familiares, que hablen inglés y que parezcan que no van a envejecer ni a morirse nunca.
 
Por eso te asusta pensar en lo de mañana. Miras a tu mujer, que plancha tu mejor camisa, y sientes que el miedo te agarrota el estómago. El día que dejó los estudios para casarse y seguirte en lo bueno y en lo malo, no imaginaste que ibas a terminar pagándole así. Mañana te pondrás esa camisa que ella plancha. Te la pondrás con una corbata y saldrás una vez más a probar suerte, con poca esperanza. Y es que tiene huevos. Has trabajado toda tu vida como una mala bestia, y verte en el paro a los cincuenta y cuatro, con hijos y con mujer a los que darles de comer, es como caer de pronto en el fondo de un pozo oscuro. Sé todo eso porque tu hijo, que es amigo mío, escribe de vez en cuando. O tal vez no es tu hijo quien escribe, sino que es otro hijo hablando de otro padre; pero en realidad se trata siempre de la misma historia. Y tu hijo me cuenta que la última vez estuviste un mes con la cabeza gacha, los ojos enrojecidos de haber llorado, sentado en el sofá como ausente, con la cara entre las manos, sin atreverte ni a salir a la calle de pura vergüenza.
 
Te preocupa sobre todo lo que piensen tus hijos. Una mujer comprende, conoce y perdona. Los hijos, sin embargo, son crueles porque son jóvenes y todavía no saben lo que siempre se termina por saber. Los ves mirarte en silencio y crees que te desprecian por los años y por el fracaso. Por no salir nunca en el telediario. Por ser la estampa de la impotencia, la confirmación de que esta vida y este país son una piltrafa. Así que supongo que los hijos son lo peor. La mujer luego, al acostaros, te aprieta una mano antes de dormirse. Sabe cómo has peleado siempre, conoce lo que vales. Quizá sea la única que de veras lo sabe. Con ella la humillación es compartida. Es soportable.
 
Y sin embargo, amigo, deberías leer la carta que me escribe tu hijo. Deberías comprobar con qué ternura y respeto habla de ti. Como sufre al saberse demasiado joven para serte útil, al no encontrar las palabras o los gestos adecuados. Porque ya sabes cómo es: torpe, desmañado, con esos pelos largos, siempre con la puñetera música a todo trapo. Con esas broncas que tenéis, y esa forma de vida suya tan diferente a la de tus tiempos, que te parece la de un marciano. Lo que no sabes es que cuando te ve derrotado en el sofá con la cabeza entre las manos, le quema la boca y le laten las venas porque desearía tener labia, ser capaz de ir hasta ti, tocarte, decirte lo que de veras piensa. Y lo que de veras piensa es que tengas ánimo, viejo, que no eres tan viejo, maldita sea, aunque él mismo te lo diga a veces. Que él no es tan crío ni tan bobo como parece, que sabe fijarse en las cosas que ve, y que te ha visto trabajar, e intentarlo una y otra vez, y querer a su madre y a él y a sus hermanos. Y sabe que eres el mejor, rediós, que eres la mejor persona, el hombre más decente y trabajador que ha conocido en su puta vida. Que eres su padre y lo serás siempre, tengas curro o no lo tengas. Que las mejores lecciones de su vida se las diste siempre y no con lo que decías, haz esto o no hagas lo otro, sino con lo que él te vio hacer. Y cuando, tarde o temprano, tenga que cerrarte los ojos -y ojalá te los cierre él- sin duda podrá decir en voz alta: “Era un buen padre y era un hombre honrado”.
 
Así que, como dicen mis paisanos de Cartagena, no te disminuyas, amigo. Mañana te pones esa camisa planchada por tu mujer y te vas a la entrevista de trabajo con la cabeza muy alta. Y si no le gustas al niñato de turno, pues él se lo pierde y que le vayan dando. Y si fracasas otra vez, síguelo intentando mientras puedas. Y cuando ya no puedas más -que siempre se puede-, pues bueno, pues hasta ahí llegaste compañero. No hay nada deshonroso en el soldado que enciende un pitillo y levanta las manos, si antes ha peleado bien a la vista de los suyos. Si antes ha disparado su último cartucho".-
 
 
"Ya sé que va a ser jodido, amigo mío. Sé que presentarse a una entrevista de trabajo, a competir con otros más jóvenes y preparados, cuando tienes medio siglo de almanaque y canas en la cabeza, no será el momento más feliz de tu vida. Probablemente los fulanos de quienes depende tu destino sean niñatos de diseño, de esos que se creen que siempre van a ser jóvenes, y listos, e incombustibles, y desprecian a la gente sin adivinar que un día ellos mismos estarán con el cuello en el tajo. Tu experiencia les importa una mierda, eso ya lo sabes. Quieren jóvenes de veinte años sin cargas familiares, que hablen inglés y que parezcan que no van a envejecer ni a morirse nunca.
 
Por eso te asusta pensar en lo de mañana. Miras a tu mujer, que plancha tu mejor camisa, y sientes que el miedo te agarrota el estómago. El día que dejó los estudios para casarse y seguirte en lo bueno y en lo malo, no imaginaste que ibas a terminar pagándole así. Mañana te pondrás esa camisa que ella plancha. Te la pondrás con una corbata y saldrás una vez más a probar suerte, con poca esperanza. Y es que tiene huevos. Has trabajado toda tu vida como una mala bestia, y verte en el paro a los cincuenta y cuatro, con hijos y con mujer a los que darles de comer, es como caer de pronto en el fondo de un pozo oscuro. Sé todo eso porque tu hijo, que es amigo mío, escribe de vez en cuando. O tal vez no es tu hijo quien escribe, sino que es otro hijo hablando de otro padre; pero en realidad se trata siempre de la misma historia. Y tu hijo me cuenta que la última vez estuviste un mes con la cabeza gacha, los ojos enrojecidos de haber llorado, sentado en el sofá como ausente, con la cara entre las manos, sin atreverte ni a salir a la calle de pura vergüenza.
 
Te preocupa sobre todo lo que piensen tus hijos. Una mujer comprende, conoce y perdona. Los hijos, sin embargo, son crueles porque son jóvenes y todavía no saben lo que siempre se termina por saber. Los ves mirarte en silencio y crees que te desprecian por los años y por el fracaso. Por no salir nunca en el telediario. Por ser la estampa de la impotencia, la confirmación de que esta vida y este país son una piltrafa. Así que supongo que los hijos son lo peor. La mujer luego, al acostaros, te aprieta una mano antes de dormirse. Sabe cómo has peleado siempre, conoce lo que vales. Quizá sea la única que de veras lo sabe. Con ella la humillación es compartida. Es soportable.
 
Y sin embargo, amigo, deberías leer la carta que me escribe tu hijo. Deberías comprobar con qué ternura y respeto habla de ti. Como sufre al saberse demasiado joven para serte útil, al no encontrar las palabras o los gestos adecuados. Porque ya sabes cómo es: torpe, desmañado, con esos pelos largos, siempre con la puñetera música a todo trapo. Con esas broncas que tenéis, y esa forma de vida suya tan diferente a la de tus tiempos, que te parece la de un marciano. Lo que no sabes es que cuando te ve derrotado en el sofá con la cabeza entre las manos, le quema la boca y le laten las venas porque desearía tener labia, ser capaz de ir hasta ti, tocarte, decirte lo que de veras piensa. Y lo que de veras piensa es que tengas ánimo, viejo, que no eres tan viejo, maldita sea, aunque él mismo te lo diga a veces. Que él no es tan crío ni tan bobo como parece, que sabe fijarse en las cosas que ve, y que te ha visto trabajar, e intentarlo una y otra vez, y querer a su madre y a él y a sus hermanos. Y sabe que eres el mejor, rediós, que eres la mejor persona, el hombre más decente y trabajador que ha conocido en su puta vida. Que eres su padre y lo serás siempre, tengas curro o no lo tengas. Que las mejores lecciones de su vida se las diste siempre y no con lo que decías, haz esto o no hagas lo otro, sino con lo que él te vio hacer. Y cuando, tarde o temprano, tenga que cerrarte los ojos -y ojalá te los cierre él- sin duda podrá decir en voz alta: “Era un buen padre y era un hombre honrado”.
 
Así que, como dicen mis paisanos de Cartagena, no te disminuyas, amigo. Mañana te pones esa camisa planchada por tu mujer y te vas a la entrevista de trabajo con la cabeza muy alta. Y si no le gustas al niñato de turno, pues él se lo pierde y que le vayan dando. Y si fracasas otra vez, síguelo intentando mientras puedas. Y cuando ya no puedas más -que siempre se puede-, pues bueno, pues hasta ahí llegaste compañero. No hay nada deshonroso en el soldado que enciende un pitillo y levanta las manos, si antes ha peleado bien a la vista de los suyos. Si antes ha disparado su último cartucho".-
 
Ric
 
 
 
 

 

Comentarios

@CECILYA

13/05/2011



RIC, CON TODO RESPETO, ESTÁ MUY BIEN ESCRITO, Y APUNTA TODO EL TIEMPO AL SENTIMIENTO, LA NOSTALGIA TE P'EGA,  LO QUE NO ME GUSTA ES QUE  EL QUE ESCRIBE EXPRESA UN ENORME PESIMISMO QUE INTENTA MEJORAR AL FINAL DANDO ÁNIMO, PERO SIN CAMBIAR LA VISIÓN, EN RESÚMEN CREO QUE EL AUTOR ESTÁ MUCHO MÁS ASUSTADO QUE EL QUE TIENE QUE ENFRENTAR EL RETO, - BUENO  PORQUE PIENSO QUE SI YO TUVIERA QUE DARLE ÁNIMO A ALGUIEN EN ESTA DIFÍCIL CIRCUNSTANCIA ME APOYARÍA MUCHO MÁS EN LO QUE HA LOGRADO Y NO EN LO QUE LE FALTA- EN LO QUE MANTIENE Y NO EN LO QUE HA PERDIDO-EN LO QUE PUEDE LOGRAR QUE EN EL POSIBLE FRACASO.-BUENO ES SÓLO UN PUNTO DE VISTA-CECILYA                                                                         
@ANSOGUAT

13/05/2011



 

TAL CUAL SOLO SON PUNTOS DE VISTA

UN BESO

RIC

 

 

   
@ROCK54

18/05/2011



Cecilya,lamento disentir con vos en ésta oportunidad,pero no creo que el texto sea pesimista,es demasiado realista!!  No es mi caso,por suerte,pero los que pasamos los 50 tenemos una dura realidad frente a los ojos a la hora de buscar trabajo, en competencia con gente joven,que aunque carezca de la experiencia necesaria dá con el perfil que muchas empresas requieren como imagen. Además,no creo que el texto apunte a darle ánimo al protagonista de la historia sino decirle "entiendo tu dolor" que en muchas circunstancias ayuda casi tanto como que nos den ánimo.

AND_SO,no siempre comparto lo que decis o subís,pero esta vez te luciste

Patricia  
@ASTIKA

18/05/2011



Hermosa carta Ric, quien la escribió es Arturo Perez Reverte, autor del libro "Con animo de ofender" y en el figura ...Carta a un padre desocupado y se llama "El último cartucho".Gracias por compartirla  
@ANSOGUAT

18/05/2011



Gracias Rock 54, es imposible tratar de agradar a todos , esta carta me le mandó una amiga entrañable que está pasando por algo parecido y me llegó mucho

te dejo un afectuoso saludo.

Ric  
@ANSOGUAT

18/05/2011



Silvia, gracias por pasarme la fuente, como le expliqué más arriba a Rock , me la mandó una amiga del alma que la está pasando muy mal, se vió reflejada en ella y necesitó hacer catarsis conmigo

Gracias

Ric  
@ROSARIOCENTRAL

18/05/2011



 Ric:

Excelente texto y refleja un tema muy actual, es un poco mi caso, pase los 50 y desde hace unos años no tengo un trabajo fijo, pero por suerte tengo unos hijos de buena madera  y siempre estan apoyando e informando de alguna capacitacion, y cuando tenes una buena familia, no importa si tenes que ajustarte el cinturon. Lo importante en estos casos es salir cada dia a buscarlo, poniendote tu mejor traje y ya encontraras alguien que si valore tu experiencia, lo principal en estos casos es no sentirse menos que nadie, aunque no hables ingles y no seas tan jovencito.  
@ANSOGUAT

18/05/2011



Edith, lo importante es confiar, todo el tiempo y no bajar los brazos, no es fácil, obviamente hay que estar en tus zapatos , te dejo un beso y toda la suerte del mundo

Ric  
@ROSARIOCENTRAL

18/05/2011



 Ric:

Seguro que hay que confiar, pero si la sociedad te considera fuera del mercado laboral porque tenes mas de 35 años, hay que ingeniarselas y confiar en uno mismo y generar sus propios ingresos, aunque no sea la profesion para la cual uno estudio. besos. edit  
@ANSOGUAT

19/05/2011



Esperanza, gracias por leerla y por tus palabras, a mí también me pegó mucho, ya que son hechos de la vida real y sufridos por gente real , resumiendo, una realidad lamentable

Ric