HACHIKO, el mejor amigo de su amo.
Publicado por
@CANONET
Esta imagen es real y muy conocida entre los ancianos de la colectividad japonesa. Es del funeral del perro HACHIKO que murió en la estación de tren de Shibuya el 8 de marzo de 1935, a la edad de 12 años de los cuales diez de ellos se los pasó en frente de la estación esperando a su amo quien nunca regresó por haber muerto en el trabajo. La noticia de la muerte del animal fue publicada por los periódicos de la época y causó gran conmoción en Japón. Hachiko está enterrado en el cementerio de Aoyama, en Tokio, junto a su amo, al que esperó hasta el día de su muerte.
Agustín:)
Comentarios
25/08/2013
Que duda queda que el perro es el amigo mas fiel? vi esta historia en pelicula y moquieee... , gracias agustin por compartirla un abrazo daniel.
26/08/2013
Les aporto un dato más .."
La lealtad demostrada por Hachiko tuvo tanto efecto entre los pobladores de Shibuya; era tan amdo que los que se iban y volvían después de mucho tiempo preguntaban por el perrito.
En abril de 1934 las familias del lugar contrataron a Teru ( Shou) Ando, un famoso escultor japonés, para que realizara una escultura él estuvo encantado de realizar ese trabajo y la estatua de bronce fue colocada enfrente de la estación, donde solía esperar Hachiko.
Hashiko, murió 1 año después y la escultura se fundió pq se la necesitó por la guerra...
los pobladores de Shibuya se juntaron y le pidieron a un segundo escultor que realizara otra escultura, esta estatua sigue emplazada y en marzo se recuerda a Hashi y se lo homenajea, para que el mje de "Lealtad y fidelidad" sea transmitido de generación en generación..."
Muchas gracias Canonet por traernos este pensamiento de vida!!!!!
26/08/2013
Muy buenos los datos aportados. Algunos los desconocía.
Yo tengo otra historia que ya he contado pero que con gusto la cuento nuevamente. Hace varios años estábamos armando un pequeño autoservicio con el hermano de una amiga de mi hermana. ël era carnicero y yo osado nomás. No diferenciaba la cebolla del verdeo del puerro ¡es cierto!
Abrimos un lunes y el miércoles a la tarde apareció un perro mestizo de ovejero. Juan, mi socio de se entonces, cortó un gran hueso y se lo dió al perro que entraba al local solo si se lo llamaba. Al rato reapareció con un gesto que no daba lugar a dudas que quería otro hueso. Se lo dimos.
Así transcurrieron dos semanas y cada vez más nos llamaba la atención que se llevara diariamente dos huesos. Una tarde le dimos el segundo hueso y lo seguí en mi Citröen 2CV Full Inyection. Caminó unos cinco cuadras y se metió en una casa que parecía estar abandonada hacía poco tiempo. Le pregunté a una clienta vecina y me contó la historia. Pichi, el perro en cuestión, iba todas las tardes a la parada del 328 a esperar a su dueño fallecido hacía varios meses. Cuando bajaba el sol se alejaba de la parada y rumbeaba para nuestro negocio. ¿Porqué dos huesos? Porque con él vivía otro perro muy viejito que apenas podía moverse. El primer hueso era para su compañero, el segundo para Pichi, el perro de la historia. La casa la vendieron y los vecinos adoptaron a Pichi y a su compañero. Pichi nunca dejó de ir a la parada a la tarde hasta que falleció. Forma parte de la historia de mi barrio.
¡Me alegra que les haya interesado la historia!
Agustín:)
26/08/2013
Emociona tu historia Agustín, cuanto amor incondicional. Gracias por compartirlo
Doy gracias haber vivido historias hermosas con éstos bichos.
Hoy disfruto de mi adorada Luna., toda dulzura.
Silvia
26/08/2013
Gracias por compartir tu historia, Canonet, que lindo saber que Pichi cuidaba del otro perrito, y que amor tenía por su amo.