Amado Padre

Mi padre amado,

Creo que por fin me has mostrado algo que puedo comprender de ti. Siempre has sido para mi algo sin definir, algo por encima de mi, algo amado pero inaccesible..... pero al fin me has hecho comprender...............Eres un hombre..... el hombre.

No de la misma naturaleza carnal que yo tengo en este mundo, sino un hombre de verdad.

El único del que proceden todas las cosas bellas, todos los sueños puros, todas las esperanzas y la fe.

Siempre te busque por caminos erróneos porque conociendo la naturaleza impura del hombre terrenal te asocié a lo inmaterial e intangible. Hoy, siento y veo que no es así. Por eso a través de tu hijo nos dijiste que eras semejante a nosotros, no en la materia sino en la esencia. Por eso estás en todo hombre que hace una bella acción, que ama de verdad, que vive en la pureza. Sé que Jesús fue tu proyección humana, en como  te quisiste mostrar al hombre.

Porque tu divinidad no es solo  Luz y  Amor sino el origen de todo lo creado.

Creaste al hombre aún sabiendo que en él debían convivir el bien y el mal, la oscuridad y la luz , que el hombre que te amara tendría indiscutiblemente que encontrarte en la semilla de su propio origen.

Y he aquí que puedo por fin verte y escucharte, tocarte, conocerte, que te muestras ante mis ojos.... solo porque en tu Amor me has querido regalar el don de llegar a ti, no carnalmente claro, pero sí con los otros sentidos espirituales.

Y aquí estas mi padre amado, llevando mi vida por senderos nuevos, por nuevas visiones que hacen de mi vida algo bello a pesar de las limitaciones de mi ser.

Padre amantísimo...... gracias, gracias, gracias...... eternamente permanezcas en mi y yo en ti.

Mi Señor, mi amigo, mi consuelo, todo lo que mi ser necesita, todo lo que anhela es estar en tu amor. Así sea

 

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