y lo perdi de nuevo.
Escrito por
@SOLODANIEL_53
Y LO PERDI . . .
Y lo perdí de nuevo !! lo corrí a lo largo del andén, pero no hubo forma, el tren ya se había ido, el muchacho que se había ubicado en el hueco de la puerta del último vagón me miraba risueño, mientras se alejaba la formación.
Otra vez tarde… no lo puedo creer, tengo la imagen del jefe escuchando con una sonrisa irónica mi excusa del día, otra vez tarde, me repetía. La madrugada, a pesar de ser invierno no estaba muy fría, la estación estaba vacía y una bruma espesa la cubría dándole un toque irreal, se escuchaba una sirena a lo lejos que completaba el cuadro bizarro de esa rara mañana de la estación de San Miguel.
Caminaba por el anden pensando en la última discusión de la mañana con mi mujer, toda la vida tratando de entenderla y creo que me voy a morir sin hacerlo, se siente en el cuerpo el cansancio de tanta discusión, tanta agresión al cuete, no se porque se complica tanto todo, en fin…
Llegue casi al principio del andén, todavía resonaba la sirena lejana, me encontré con un viejo que estaba sentado a un costado, abrigado con un gabán negro, que de tan gastado parecía plateado, me miró con una mueca parecida a una sonrisa, mientras fumaba nerviosamente un cigarrillo, me saludó como si me conociera de antes, le sonreí y devolví su saludo, le comenté mi fastidio por haber perdido el tren, él se incorporó y levantándose el cuello del viejo abrigo me dijo que había ocurrido un accidente en la barrera, que el tren había golpeado a una persona y la había arrojado hacia el medio de la calzada, le comenté que a pesar de eso no lo pude alcanzar.
Es un tren muy especial el que perdió, deslizo en voz baja, en el rápido de las 6,20 viajan, todos los días, aunque usted no me crea, muchos obreros que viajaron toda su vida y que al morir eligieron quedarse arriba de los vagones del viejo ferrocarril San Martín, créame usted que no hay cielo posible y que nuestras almas se quedan prendidas de cosas que vivimos toda la existencia, por eso no es raro encontrar estas almas al lado de máquinas que manejaron toda la vida, o en las obras de construcción velando por la seguridad de sus ex-compañeros, le puse mi mejor cara de incredulidad y él con una sonrisa paternal me dijo que prestara atención cuando viajara que hay situaciones que no son normales. Me quedé pensando y me acorde de dos situaciones que realmente me parecieron extrañas, pero claro… al ritmo de vida que llevamos damos por normal muchas cosas que no lo son.
En una de ellas, me acuerdo estar viajando en el segundo vagón de este tren, y escuchar de pronto gritos en el vagón de al lado, como pude me asomé al otro vagón para ver que pasaba, un pasajero estaba teniendo un infarto y se estaba muriendo, el coche se me presentó muy iluminado, con luz que entraba de todas las ventanillas, esto es muy raro, porque el sol entra por un lado o por el otro, según la hora del día, obviamente es totalmente inusual que entre luz por todos lados.
Me costó llegar cerca de este hombre, un mujer tenía su mano y un hombre trataba de improvisar una camilla entre dos asientos, habían abierto la ventanilla para que no le falte aire, pero hubo algo que realmente me llamó la atención, en ese rincón del vagón no había mucha gente pero parecía que estaba lleno, no había forma de acercarse. El hombre falleció, el tren se paró en Chacarita y nos tuvimos que bajar todos a buscar algún otro transporte, ese episodio me duró bastante tiempo en la memoria.
El otro, tal vez no tan impresionable como el recién comentado había ocurrido hacía bastante poco, un día como cualquier otro, pero de esos días de lluvia interminable, que llueve todo el tiempo, viajaba de regreso a casa en el tren de las 18,34, rápido también, y observé que había una niña, que apenas había salido de la infancia, cargando un bebe recién nacido, se acomodaba como podía, se notaba dolorida y acongojada, me dio mucha pena, pobrecita pensé, le dieron el alta y como pudo solita ella y su bebe volvían a su casa, sin que nadie los acompañara, en el medio de ese día tan feo.
Era una situación que inspiraba ternura y compasión, pero no tenía nada de anormal, salvo que en determinado momento y supongo que por efecto del cansancio ella se duerme y sus manos sueltan al bebe, el niño se mantuvo en el mismo sitio sin nada ni nadie que lo sostuviera, virtualmente en el aire, traté de fijar la vista pero era imposible hacerlo, la niña se relajó dormida y se sonrió como si la consolaran.
Le comenté esto a mi circunstancial amigo y me comentó que él, vaya a saber porque designio divino o no, podía verlos, me dijo que ellos confortan a los pasajeros, los acompañan, los abrazan, lloran sus penas y los cuidan para que nada les pase.
Nos quedamos en silencio, el próximo tren entró a la estación y me giré para despedirme del viejo, y ya no estaba al lado mío, había vuelto a su precario asiento al costado del andén con una mueca de dolor en su cara, pobre viejo, pensé, como le deben pesar los años y las angustias, me dio pena no haberle preguntado aunque sea el nombre.
El tren se detuvo, subí a la formación, como siempre estaba completo, se echo a andar y ya me había olvidado del viejo y sus historias de fantasmas, traje a mi mente la cara de mi jefe retándome por la llegada tarde y la cara de mi mujer con una sonrisa más grande que su cara al despedirme de casa, sin tener en cuenta la sarta de pelotudeces que me había tirado hacía nada más que un instante antes, si… realmente incomprensible.
Cuando estábamos llegando a Hurlingham noté que alguien me miraba, era un señor de mediana edad, que me sonreía, era algo extraño, tenía como un tenue haz de luz alrededor de su cuerpo, me saludó con un movimiento de cabeza, asentí para devolverle el saludo y me quedé mirando para afuera, miré para el otro lado y también había varias personas que me miraban y se sonreían, no entendía nada, se fueron acercando y me saludaban, eran muchos, gente normal, todos con su ropa de trabajo, gastada por los años, charlaban entre ellos y se reían y prestaban atención al andar del tren, el resto de los pasajeros parecía no entender lo que estaba sucediendo, cada cual en sus problemas no alcanzaban a ver el alboroto, me quedé pensando en el viejo, que me habrá echo ? me habrá pasado el don de poder verlos ? no lo podía creer ! ahora voy a poder observar lo inobservable, voy a ser, junto al viejo, uno de los pocos afortunados en tener ese don, poder escuchar miles de diferentes historias, poder compartir con mis fantasmas obreros mi historia también, lástima que no podía compartirlo con nadie, el resto de los pasajeros seguían enfrascados en su realidad mirando siempre los mismos paisajes a medida que avanzaba el tren.
Cruce abrazos y sonrisas con muchos de ellos hasta que el tren llegó a mi destino la estación de Palermo, los saludé sin mayores efusiones solamente con una sonrisa, fui bajando del tren mezclado con la gente y cuando apoye el pié en el anden noté que a través de mi zapato podía ver el piso de la estación… al final me quedé en el tren.
Daniel Hernández
20/10/11
Comentarios
@SOLODANIEL_53
19/11/2014
Soy nuevo aquí.. en realidad no entiendo todavía como funciona.... solamente quiero acercarme para poder compartir con ustedes un poco de lo mío. Espero que les guste...
@MARIO
19/11/2014
Bienvenido !
Me gustó tu narración. Gracias por compatrirlo.
Mario
@SIL_VANA
19/11/2014
Buenisima narrativa Daniel !!! Sùper atrapante . Làstima que sucedio en San Miguel , no voy a querer tomar màs el tren . Mejor salgo de Los Polvorines .
Bienvenido !!! Què disfrutes de esta pàgina .
Silvana
@SOLODANIEL_53
19/11/2014
Gracias por sus comentarios !!! y Gracias Mario por la bienvenida !!
@LA_SU
19/11/2014
Muy bueno Daniel. Me gustó mucho tu manera coloquial de narrar. Felicitaciones. Su
@SOLODANIEL_53
19/11/2014
Muchas Gracias Su por tu comentario !! Saludos.
@AMIX
20/11/2014
"...Cuando estábamos llegando a Hurlingham..." a partir de esas palabras comencé a darme cuenta de lo que pasaba, senti una inquietud, como un nerviosismo mientras leía. Realmente lograste transmitirme la esencia de esta notable historia cotidiana sin nada de cotidiano, la historia de los vivos, lo muertos y los fantasmas. Excelente!
Al igual que Mario te doy la bienvenida! Amir
@SOLODANIEL_53
20/11/2014
Muchas Gracias por la Bienvenida Amir !! y que bueno que te haya gustado el cuento... tengo unos cuantos que, con el tiempo iré publicando.... Saludos !!
@LA_BELLA_VIDA
20/11/2014
Buenas tardes DANIEL, encontre tu publicación, me encanto, muy atrapante hemoso
FELICITACIONES !!!!!. Toda mi vida viaje en el San Martin, subia en la estación SAENZ PEÑA hasta RETIRO, Que hermosa epoca !!!!!
Gracias por compartirlo
@SOLODANIEL_53
21/11/2014
Gracias Zaira por tu comentario.... que bueno que te haya gustado el cuento !! Saludos.
@MONICABAN
22/11/2014
Gracias Daniel ! Bienvenido y muy interesante relato...La vida, la realidad, lo imaginado, lo cotidiano y lo que una vez "naturalizado" logra romperse y generar otras vivencias...Muy bueno !!
Mònica
@VILMY
22/11/2014
Muy buén relato .. me atrapó , te felicito ..
Bienvenido a la pág Daniel
@SOLODANIEL_53
22/11/2014
Monica y Vilmy gracias por vuestros comentarios !! y Gracias por la Bienvenida.... de a poco me estoy integrando cada vez más con ustedes y eso está bueno...
@MONICABAN
22/11/2014
@VILMY
23/11/2014
Daniel , está bueno Encontrarse.com ..Que sea tú lugar de lindos encuentros ..
@SOLODANIEL_53
23/11/2014
Gracias por tu deseo Vilmy !! y ojala que asi sea.... es un buen grupo, hay códigos de grupo que tengo que respetar y ya los estoy entendiendo... por lo demás... disfrutar las reuniones con personas excelentes !!
@VILMY
23/11/2014
Lo mejor
@LALY45BSAS
30/12/2014
Simplemente...M A R A V I L L O S O !!!!!!!
@SOLODANIEL_53
30/12/2014
Muchas Gracias Laly !!!
@JULIETHA
10/02/2015
Me encanto,gracias por compartirlo !
@SOLODANIEL_53
11/02/2015
Muchas Gracias Sand.. Julietha !!
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