Escrito por
@JORGE_EMILEO

30/05/2015#N53442

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Anochece.

 

En el jardín las sombras

esfuman las plantas y vuelven todo gris.

 

Es la hora

de callar los gorjeos

de apagar

los brillantes colores de las mariposas,

de volver negras

las verdes hojas de los árboles,

de llamar a recato

a las flores hermosas.

 

Hay un mundo que cesa

y otro mundo que nace,

en el apogeo de los ruidos nocturnos.

 

Recogidos en la cálida intimidad

junto al fuego del hogar,

los recuerdos

invaden nuestro cuarto.

 

Con vos,

sentada al lado mío

(aun cuando no estés),

no temo a los fantasmas.

 

 

 

 

Comentarios

@LUCCIANA03

30/05/2015



Hermosa poesía. Gracias por compartirla. Lucia  
@MARASOL

30/05/2015



GRACIAS JORGE, MUY LINDA  
@ESLIAB

31/05/2015



Es hermosa... a pesar de que cuando se apaga el sol y queda solo el añil oscureciendose cada vez mas, la melancolía del día que terminó surge por un momento hasta que uno enciende las luces y la mente da paso al nuevo mundo que mencionas. Entre dos luces es un tiempo especial que muchas veces da un tironcito en el alma. Te mando un saludo compañero escritor.