CARAMELOS

Publicado por
@HUGOSO
A mediados del siglo XX, o sea, del 50 para acá, no había la cantidad de golosinas y kioscos que hay ahora, por eso en aquella época, cuando éramos niños, se acostumbraba a repartir caramelos a los compañeros de escuela para el día del cumpleaños. No cualquier caramelo..........no un Media Hora o unos Gajitos de mandarina que venían con la forma de la fruta pelada envueltos en papel celofán transparente y con una cinta verde a modo de hojitas. Esos no,..............esos eran los que traían las tías o las abuelas en una bolsita de papel blanco. Ni pensar tampoco en llevar al colegio un caramelo Chuenga.........esos eran cosa de varones, de fútbol, de domingos; de cuando todavía no existía la globalización y un señor de sobrenombre Chuenga, podía fabricar sus propios caramelos y elegir un único lugar de venta: la cancha de fútbol. Y miles de personas esperando ver aparecer a un señor flaco de nariz prominente y abundante pelo revuelto que tenía los codiciados caramelos blancos y rosas, de tosca manufactura, sin envoltorio, indignos para un cumpleaños. Tampoco quedaba bien un masticable MU - MU o un Sugus porque esos venían en paquetes muy chicos y eran para el cine. Tampoco llevar las Gallinitas o chupetines Topolín.......Debía ser algo importante, especial, no cotidiano. La magnitud del evento requería caramelos envueltos primero en papel dorado y luego en papel celofán, en cantidad suficiente, comprados en una bombonería, todos juntos en una bolsita, con moño de cinta brillante: tales requerimientos solo eran cumplidos por los caramelos suchard bañados en chocolate.
Comentarios

09/09/2015

Gracias por recordarlo, es parte de mi infancia... muy bueno tu artículo.
Saludos.

10/09/2015
Me alegro, Mara, que hayas recordado tu infancia con el artículo. Don Chuenga era todo un personaje; yo lo vi dos o tres veces, y me encantaban los caramelos. Y ya que nombrás el Parque Avellaneda, recuerdo cuando era chico mi madre me llevaba los domingos a pasear en el trencito que recorria el parque, eso era allá por los años 60.

Saludos

10/09/2015
Te cuento que el trencito aún sigue recorriendo el Parque y alegrando a los chicos, el parque esta lindo ese barrio se formo con ese parque, y con los campeonatos de futbol que se hacián con el cuadro los Picapiedras que formaban gente del Barrio, en dónde estaba, el Bambino Veira que vivio por alli y otros que no recuerdo y que como eran amigos de él venian y se unian al cuadro barrial. Se entraba por la calle Fernandez, sin rejas directo a la Cancha Mayor, estaban los vestuarios que siguen y se hacian campeonatos entre barriales en dónde iba toda la flia. era disfrute y buena onda, con asado de por medio organizado siempre por e padre de alguno. Yo disfrute el parque yendo a ver esos partidos y acompañando a mi padre y mis hermanos que jugaban al futbol en grupos por edades...ni te cuento... el Parque era la unión del Barrio, y Chuenga con su bolsa de caramelos andaba por alli antes de irse a las canchas.
Ahora cambio algo, esta enrejado, asisten a él ya no los chicos del barrio, si de otras nacionalidades, como bolivianos y ¡ojo no discrimino!... pero tienen otras costumbres. Pero El Parque esta, con su pista de atletismo, sus vestuarios, sus piletas, su parte de la plaza, grande y hermosa sobre Avda Directorio. con sus grandes paseos, la casona de quien fue su dueño, con musicales de sábados y domingos... los juegos para niños... pero por sobre todo esos grandes arboles añosos, eucaliptus la mayoria, que dan un aroma hermoso. Y el vivero más importante de la ciudad que abastece a todos los parques y plazas
Bueno me extendí, pero era y seguirá siendo mi Parque Avellaneda, el de mi niñez en los años 60, el de mi adolescencia, dónde paseabamos con nuestros primeros novios... y obvio lo sigue siendo hoy y siempre. Pues es un espacio verde hermoso para ir y disfrutar
Gracias a vos por tu artículo y recordar todo esto.
Saludos

Más notas de LibreVer todas
Más notas de Libre


