Ni buena ni mala, diferente

Así podría comenzar definiendo a la soledad .
Una dama intangible, pero real, que se hace sentir aunque no hable, profunda y a veces oscura y dolorosa.
El ser humano es sociable por naturaleza, dicen los libros de sociología. Se vive en comunidades, cooperando con otro igual, peleando, riendo, llorando, compartiendo emociones, trabajando, y todo lo que conocemos en nuestra cotidianeidad.
Pero siempre , el algún momento del tiempo, buscamos aislarnos, con diferentes fines, las mujeres indias lo hacia para parir, era un acto de concentración plena, traer una vida al mundo, los soberanos hacían retiros para tomar decisiones importantes, los religiosos buscan al ser supremo-en este caso se podría establecer que no estarían solos-, cuantas veces nos aislamos para meditar, concentrarnos en algo especifico, descansar, y porque no hablar con nuestros muertos.

Vemos que hasta aquí, esta incorporada a nuestro accionar diario, si bien esta soledad es tremendamente corta desde el punto de vista tiempo, y en general la regulamos nosotros, con nuestras voluntad , pudiendo retornar al mundo de la compañía humana, inmediatamente.

Desde lo afectivo, uno siempre trata de estar rodeado de los seres que ama, porque así lo siente, es un estado de bienestar, protección, afectos, llámese, esposa, marido, pareja, hijos, amigos, padres, etc.

Pero cuando hay una alteración de un vinculo afectivo, cualquiera sea la causa, sobretodo en una pareja, la unión se torna inestable, la convivencia negativa, la relación dañina para ambos, y se llega a la ruptura, por lo que aquí la soledad , seria la protección de los individuos, el medio en el cual se puede llegar a realizar una análisis de la situación, si tiene solución o no.

Este es otro caso, la soledad hace de protección, aislante, y regenerante de nuestros estados emocionales.

Se torna perniciosa cuando se prolonga en el tiempo, cuando se aísla mas y mas, para autoprotegerse. Cuando se busca compensar una caricia, una palabra, una mirada , el calor y química del otro, con la tecnología que nos rodea, televisión, radio, Internet, etc.
Estos medios son importantísimos para nuestra vida diaria, información, entretenimiento , relaciones, pero no es la mano que se tiende y la piel que se toca. Es un medio pero no es un fin.

Por lo tanto, si bien la soledad la sufrimos muchos, esta en nosotros acercarnos nuevamente al rebaño del cual nos alejamos, para continuar nuestra vida de la mejor forma que la disfrutemos , que es sociablemente junto a los nuestros.

Daniel.

 

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