solo para mujeres (kryzia)

Luego de un largo periodo olvidé lo que era salir por las calles con los tacos ensillados en los pies. Llegó el día. Era gris, aburrido y quise desafiarlo: "Tengo ganas de arreglarme" y me puse los stilettos que sólo había usado en una fiesta, con falda corta y zapatos puestos, emprendí viaje hacia el colectivo. No me había percatado de que fuera tan largo. La suerte no estaba conmigo: comenzó a llover. Correr era imposible e hice como sino pasara nada. Una marcha dolorosa, aunque casi perfecta, se interrumpió. Levanté la mirada para cruzar y aterricé en un agujero que la municipalidad había dejado olvidado. No era profundo, pero un doblez de tobillo entorpeció mi andar. Ahora debía jugar a la reyuela: alcantarillas, desechos, carteles, etc.. Olvidé un detalle ¿cómo salir entera al pisar esas baldosas que acumulan agua sucia?. Con las medias a manchas dije: "No importa, el colectivo está allí, en un instante estaré a salvo". Pero una frenada me anticipó el chapuzón y los stilettos se inundaron. De a poco se fueron achicando y no dudé más, me los saqué. Descalza y empapada, volví a buscar las chatitas. Eso sí, lo que pasó con la mini lo dejo para otra historia. ¿piropos? Ni uno. ¿ o será que no los escuché?

 

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